Sobrevivir sin gluten

¿Qué es la celiaquía?

Es una intolerancia al gluten que aparece en individuos predispuestos genéticamente. Las personas que no padecen celiaquía digieren el gluten igual que lo hacen con el resto de nutrientes, pero el sistema inmune de los celíacos reacciona ante la presencia de gluten en el intestino delgado mediante reacción inflamatoria dañando la mucosa y dificultando la absorción de nutrientes.

El gluten está presente en infinidad de alimentos ya que proviene del trigo, centeno, cebada, avena, kamut o sus variedades híbridas.

¿Es curable?

No, no es curable. Es una enfermedad que te acompaña toda la vida, pero cuidando la alimentación podemos evitar los síntomas.

¿Cuáles son los síntomas?

Es habitual que su diagnóstico sea en edad temprana, en torno a los dos años de edad, aunque cada vez hay más casos de personas en edad adulta. Además, la genética predispone su aparición, por lo que si un familiar cercano la padece, hay más números de que toque la primitiva.

Los síntomas habituales son:

  • Malestar intestinal, diarrea o estreñimiento
  • Distención abdominal
  • Pérdida de peso o de apetito
  • Vómitos
  • Dermatitis
  • Retraso de crecimiento en los niños
  • Anemia por déficit de hierro, ácido fólico…
  • Fracturas óseas, debido al déficit de calcio y vitamina D
  • Alteraciones del carácter

Existe un elevado porcentaje de pacientes sin diagnosticar (75%), ya que durante años la presentación de sintomatología clínica sin pruebas diagnósticas era la forma clásica de detectarla. Hay personas que la padecen sin síntomas.

¿Cómo se diagnostica?

El conocimiento reciente de distintos perfiles de formas clínicas de presentación de la enfermedad hace que para un diagnóstico claro y seguro, además de examen clínico y analítica de sangre con los marcadores serológicos de enfermedad celíaca, sea del todo imprescindible la realización de una biopsia intestinal.

¿Cuál es el tratamiento?

Los medicamentos no existen para paliar la enfermedad. Delante de una celiaquía lo único que funciona y que se tiene que controlar al 100% es la alimentación, libre de gluten. La ingestión de pequeñas cantidades de gluten daña el intestino y causa trastornos no deseables, que en muchas ocasiones pasan desapercibidos, como la falta de hierro, ácido fólico, vitamina D, etc., y los síntomas detallados anteriormente.

La dieta como compañera de batalla

  1. No se debe iniciar la dieta libre de gluten sin previo diagnóstico de la enfermedad. Asegurarse y visitar al médico para programa las pruebas necesarias es requisito esencial.
  2. La dieta libre de gluten debe seguirse muy estrictamente durante toda la vida para conservar un intestino sano y evitar lesiones en él.
  3. Los alimentos que no contienen gluten en su origen son básicos para el celíaco: pescado, carne, huevo, leche, cereales sin gluten (arroz y maíz), tubérculos, legumbres, verduras, frutas, pan sin gluten, pasta sin gluten…
  4. Los alimentos procesados industrialmente conllevan riesgos. La legislación obliga a especificar el origen de las harinas, almidones, féculas o cualquier otro derivado de los cereales que contienen gluten en la etiqueta del producto. No es una medida del todo segura. En internet, en las webs de las asociaciones de celíacos, hay listas con productos y marcas que contienen y no contienen gluten. Los alimentos completamente seguros son los que llevan la marca sin gluten en su envase.
  5. Los elaborados sin etiqueta como pueden ser los productos a granel, y los elaborados artesanalmente deben eliminarse de la dieta.
  6. Debe evitarse freír alimentos sin gluten en la misma sartén que aquellos que contienen gluten.
  7. Mucho cuidado en bares, restaurantes y comedores escolares. La manipulación puede no ser la más correcta y conllevar contaminación de gluten. Patatas fritas con freidoras que también se utilizan para freír croquetas, tortillas de patatas con levadura, salsas con harina, purés con harina, etc., son ejemplos de riesgos que pueden aparecer. Preguntar es de sabios y consultar la forma de elaboración e ingredientes antes de consumirlo es lo mejor.