¿Cuál es mi peso ideal?

Los pacientes que vienen a mi consulta quieren conocer mucha información acerca de la dieta que les propongo. Es algo normal, teniendo en cuenta que es el motivo por el que los tengo delante. Además de querer conocer su peso ideal, algo también muy común de consultar.

Cuando voy por la calle y me encuentro con compañeros, amigos o conocidos es habitual que surja alguna pregunta como: ¿Crees que debería perder peso? ¿Puedo comer esto si quiero adelgazar?…Hasta que llega la pregunta con la que me quedo sin saber que responder: ¿Cuál sería mi peso ideal? .Creen que debería dar con una cifra exacta solamente con echarles una ojeada (todo y llevar el abrigo puesto) pero resulta algo difícil de acertar, y más teniendo sólo tres segundos para responder.

No quiero jugar al que pasa si no te acierto…

El peso ideal, ¿Qué es?

Es el peso con el que nuestro cuerpo goza de máxima salud. Permite que funcionemos con normalidad, sin problemas en un futuro. La definición académica sería “el peso que confiere la máxima esperanza de vida”.

Muchos estaréis pensando cuál debe ser vuestro peso ideal, pero no se trata de un peso en concreto, ya que el peso ideal hace referencia a un rango de peso, y nunca a una única cifra.

Por debajo de este rango nos encontraremos con delgadez excesiva. Son muchos los jóvenes que a día de hoy se siente bien físicamente y emocionalmente llegando a pesar mucho menos de lo que indicaría su peso ideal, suponiendo un serio problema para su salud. No negaremos que la publicidad que nos venden los medios tiene tendencia a inclinarse hacia este rango inferior de peso.

Al sobrepasar el peso ideal hablaremos de sobrepeso y obesidad hasta llegar a la obesidad mórbida en su extremo máximo. Llegar a estos extremos también compromete la salud.

Factores que influyen en el peso ideal

Sexo, altura, edad, complexión, peso actual y composición corporal son datos necesarios para saber con exactitud el peso ideal. Si no se dispone de alguno de estos datos, la exactitud no será la misma. Y todo esto teniendo en cuenta que nos referimos a personas sanas, ya que cuando existe un problema o una enfermedad se tendrán que valorar, además, otras variables.

Hay tablas que se basan en la edad, el sexo, el peso actual y la altura, con datos rápidos y fáciles de obtener. No se deben subestimar, ya que son una guía eficaz, pero les falta exactitud porque no personalizan. Entre otras cosas, no tienen en cuenta la composición corporal de las personas.

Composición corporal, un arma infalible

Conocer la composición corporal de una persona es saber la cantidad de músculo y de grasa que tiene. Con estos datos el margen de error del peso ideal se reduce al mínimo.

Hoy en día existen aparatos de bioimpedancia, como el que tengo en la consulta, que con el paso de una pequeña corriente eléctrica permiten calcular cuanta grasa, agua, hueso y músculo tiene una persona.

La cantidad de grasa y músculo son datos que permiten conocer el estado de forma física, y acercarnos más al peso ideal. Un ejemplo práctico lo encontramos en deportistas con mucho músculo. Si nos fijamos en tablas que sólo tienen en cuenta factores como el peso, la altura, la edad y el sexo, podríamos llegar a la conclusión que tienen un peso excesivo, lejos del peso ideal. Ahora bien, la bioimpedancia nos permite saber más y nos indica si este exceso de peso es consecuencia de tener más músculo (deseable) o más grasa (no deseable).

Con todo esto, podréis comprobar vosotros mismos que en sólo tres segundos no da tiempo a responder lo que muchos me suelen preguntar.